La Asociación Mi Rancho nació a partir de una inquietud por la situación en la que se encontraban los niños y las niñas en las calles de Santa Cruz. En ese momento, aunque ya existían algunos recursos disponibles, pensamos que era necesario ofrecer un nuevo programa en el cual los niños tuvieran una mayor autonomía, independencia y protagonismo.
Así, nuestra asociación fue fundada el 15 de agosto del año 1.992 como un programa destinado a hacer posible la realización del niño en todos sus aspectos.
De esta forma, los niños decidían, por medio de una elección independiente, personal y convencida, hacer un proceso de cambio en un centro de “puertas abiertas”, en un ambiente familiar y libre.
Transcurrido un tiempo, y debido a las necesidades observadas a través del trabajo que realizábamos en las calles de Santa Cruz, nos planteamos un nuevo objetivo: ofrecer una alternativa de vida a las adolescentes y mujeres que, con hijos/as o sin ellos/as, se encontraban en la misma realidad.
“Lo que intentamos en esta nueva experiencia es un reto. Queremos darle al niño la posibilidad de vivir su vida de niño; devolverle la normalidad de vida; habilitarlo y ofrecerle la posibilidad de realizarse como persona.
Es un reto. Es toda una vida consagrada a ellos. Se necesita mucho amor.
Amor que es donación, sacrificio y olvidarse de sí mismo.
Es una empresa a fondo perdido.
Los asumimos como nuestros hijos: caminaremos con ellos como auténticos padres.” [1]
[1] Texto extraído del prólogo del primer proyecto (Enero 1996), realizado por Germán Herráez, fundador de la Asociación Mi Rancho.
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En el año 2000 se ponía en marcha el programa “El Pahuichi”, que abarcaba una casa de acogida para mujeres. Un lugar donde juntarse, conversar y convivir, donde aprender entre todas y tener oportunidades de cambio.
Además de la casa de acogida, el programa “El Pahuichi” centra una gran parte de su intervención en las calles, a través del apoyo social y asesoramiento médico y legal a mujeres. Este proyecto finaliza en el año 2014.
En el año 2002, nace la “Casa de Niñas y Niños Los 2 Patitos”, un programa dirigido a los hijos e hijas de las jóvenes atendidas en “El Pahuichi” con el propósito de facilitar el desarrollo laboral y personal en otros ámbitos, ofreciendo a sus hijos/as estimulación, conocimientos y ocio sano. En la actualidad, este espacio está abierto a todas las familias de la zona que lo demanden.
En 2007 surge el Colectivo de Mujeres “SoñArte”, con el fin de facilitar una salida laboral digna a jóvenes en situación o riesgo de exclusión social.